-A la colonia Colombiana
y a mi amigo Luis Alfonso Segura, Merideño de Cali con 50
años en mi ciudad, torero y comentarista de valía--
Colombia es
tierra de toros bravos en américa y cuna de triunfales toreros como
Pepe Cáceres, Jorge Herrera, Enrique Cavo “El Cali”y
claro esta un predestinado como lo es el maestro… Cesar Rincón.
Rincón de novillero
hablo con capote y muleta y pronto tuvo en sus manos fuertemente
asido el cetro de los elegidos cosa que mantuvo durante sus años de
aspirante al estrellato de luces y que paseo por todo el mapa
neogranadino ganándose a admiración de los públicos y el respeto
de los revisteros taurinos.
Hay una anécdota triste
que recordarla es valorar el amor por el arte y no es otra de la
amarga experiencia que vivió cuando toreaba una novillada y su mama
y su hermana Mónica encendieron una vela al santo de su fe para que
acompañara al muchacho en su actuación, quedándose dormidas ambas
habiendo corrido con la mala hora de que el cirio ardiente se cayo
y provoco un incendio donde murieron las dos, dejando en el corazón
de Cesar una estigma imborrable y una cicatriz en la piel de la
memoria con tinte perenne de dolor.
Fortuito acontecer que no
detiene la vida y llevaron al Bogotano hasta la tierra de Cervantes
en busca de un sitial que le pertenecía y lo estaba esperando para
colocarlo en su plinto pues el pequeño caballero de luces cuando
rompió se disparo como figura hacia las cimas con la anuencia de
los vecinos de la villa del oso y el madroño… Madrid.
Luego de matar varias
corridas ganadas a fuerza de arrimarse, de aceptar matar lo duro, de
ver como enfermaban a un torero para que el lo sustituyera y un toro
lo acabara, inventaron el mano a mano entre el y Ortega Cano
festejo en el que Rincón alzo los brazos con tres orejas y
dijo… estos son mis poderes, acariciando Ortega el triunfo
días después al indultar a “velador” de Victorino Martin con
todas las de la ley.
Graves cornadas
aderezadas de feas volteretas no amilanaron al joven maestro todo lo
que salía por los toriles tenia su lidia y casi la mayoría se iba
a las oscuras sombras del destazadero sin orejas, aleluyas de
entrega que hizo que la tierra del idioma se inclinara ante la
grandeza del hijo del apreciado Gonzalo Rincón, para sus
amigos… “mojicón”.
En esas arenas Rincón
escribió con letras de nivel pensante un historial lleno de
elegancia y admiración donde la tacha aplaudía y el error
ovacionaba gestas escritas con ortografía de precisión donde
la gramática del mensaje llevaba puntos y comas de lento
observar dejando en cada faena hecha, escritos con signos de
admiración que enmudecían al entendido.
César Rincón saliendo a hombros por la Puerta Grande de Las Ventas en 1991 |
CESAR
RINCON en Madrid pudo con lo que lo pusieron a matar…Cobaleda,
Miura, Partido de Resina, Victorino, Pahla vaya tragos
amargos, para luego poder romper hasta exigir Torrestrella Viento
Verde y toda la línea Domecq con las que complació a los
criadores y a la afición.
Rincón al igual
que Antonio Ordoñez Araujo fue mientras estuvo activo
un punto y aparte del toreo pues su muleta planchada era cual espejo
en e cual los toros se querían ver de ahí aquel secreto mágico
que lo encumbro y lo paso a los anales de la historia como elegido
de las musas, viendo ahora las corridas desde la barrera con un puro
pasando mas miedo del que pasaba cuando se ponía por delante pues
ahora son seis sustos con sus pastueños y bravos Las Ventas del
Espíritu Santo.
Cesar repitió estas
dosis en todas las plazas de esta américa de recuerdos añorados,
San Cristóbal con “peluquero, Mérida con “comandante”
ambos Molineros de Hugo, esas gestas son muestra de su
supremacía cosa que repitió en su país natal y en la cantarina y
musical tierra de Juárez.
JULIO CESAR RINCON
RAMIREZ para sus señas personales y CESAR RINCON para su
grandeza torera, se quito del oficio cuando en plenitud profesional
había madurado y los públicos lo exigían…Ora maestro
Rincón… tu toreo es oración, poema corto que una vez le
compuse el cual aderezado de otros, rezan de la gloria de este
Bogotano de luces… Como quisiera Botero, hacerte una estatua
obeso, sonriendo y en cuerpo entero, de mármol… y no de yeso.
En una feria de Sol que
se encontraba en barreras le entregue el poema y luego de leerlo me
dijo…no… no me merezco esto poeta. A lo que le
replique… ahí va mi admiración, eso y mucho más.
Cuando supero la
hepatitis adquirida de la buena fe de un admirador que le dono sangre
pero tuvo este mal, Rincón se enfundo de nuevo en el principesco
talar de luces por lo que escribí…Suenen cañones y
arcabuces… toda Colombia es emoción… se ha vuelto a vestir
de luces… el ínclito torero… Don CESAR RINCON.
Termina el poema titulado
ORA CESAR RINCON de esta manera…En la punta de tu espada,
cuando hieres el morrillo, tus manos hacen la cruz, y el
poderoso testuz inclemente ante la muerte, en ese momento de
suerte que no es nadita sencillo, se te agiganta la fe, pues
cuando arrastras la pierna, buscando la gloria eterna,
le das vida al volapié, matando para triunfar el toro ofrenda su
raza en tan gallarda oración, entregándole la vida al
diestro… CESAR RINCON.
Aun esperamos la
desvelacion de una estatua en las afueras de la plaza venteña para
orgullo de Colombia, satisfacción de américa y deferencia de
España…
va por Uds.…¡¡Castoreño en mano…!!
0416 7703846-.
COMO HUBIESEN SIDO LOS
TRIUNFOS DE RINCON EN EL NUEVO CIRCO DE CARACAS…QUE SE ABRAN SUS
PUERTAS.
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