-A los admiradores de
Paula Romero y Morante ellos entienden ese “no se que”-
Paula y Morante de la Puebla |
El arte
querido lector según mi concepto es desechar del oficio la
pastosa abundancia de las líneas curvas manar de muy dentro
ese ángel esquivo que solo toca a elegidos para ponerlo
de manifiesto a través del desempeño.
No se debe llamar
ignorante al que no entiende el oficio… no porque de pronto lo
entiende y deja de ser una vaga y amena filosofía para convertirse
en certeza y querencia del alma.
Han sido muchos los
toreros que han toreado como los ángeles manifestando una pasmosa
quietud y serenidad que permite oír el lento rodaje de las horas a
través de los minutos se dice que detienen el tiempo pero una cosa
es torear lento y otra con plasticidad y belleza podio y olimpo del
toreo preciosista.
En España el mito de
Curro Romero se mantuvo hasta su fin como torero, Camas su
pueblo y Sevilla su novia, mantuvieron aquel tabú en torno al
gitano sin poder llegar a la conclusión que Curro era torero de
pellizcos no de faenas admirables, pues pegaba muletazos aislados
con un sello personal Romerista.
Parecer ser que la
cobriza piel de los toreros morunos oculta aquel “miedo”
indescifrable del toreo llena de similitrukis aureolados de
arte lo cual llaman pellizcos.. Y entre responsabilidad
profesional y espantadas surge cual duende travieso una labor
vistosa
Rafael de Paula |
Sabemos que Rafael
Soto Moreno “Rafael de Paula” llevaba en sus adentros la
innata bendición del toreo Merlinista con capa y muleta pues los que
han visto a este torero Jerezano ante un toro a su medida han podido
contemplar la inmedible dimensión de su toreo como aquel quite por
Verónicas en Madrid donde paro a la gente de sus asientos y tuvo que
dar la vuelta al ruedo en medio de sonoras ovaciones.
De Paula aun
maduro disfrutaba su oficio y se hundía en el sopor de su ejercicio
pues cuando tomaba la muleta y se cruzaba ante los pitones de los
toros la plaza se llenaba de un silencio con eco de oles
murmullantes que gritaban con mudez queda la admiración por
este gitano de Jerez de la Frontera ya que embebía al toro en la
bamba de la muleta, adelantaba la pierna, sacaba el pecho, pegaba la
barbilla al pecho y alzando un tris el talón izquierdo, erigía
sin esculpir, la hermosura del derechazo cosa igual sucedía con los
naturales diferenciados por llevar la espada en la derecha pegada a
la cintura.
Hoy día este
inconmensurable representante del toreo preciosista sin cortapisas
trucos ni picos anda frisando los 83 años y mitiga la pasión de su
alma haciendo campo ante las vaquillas del campo bravo Español.
Morante de la puebla |
José Antonio Morante
Camacho “Morante de la Puebla” es nacido allí en ese pueblo
llamado la Puebla del Rio en la ciudad de la torre del oro en Sevilla
remanso de paz de las aguas del Guadalquivir.
Tiene en sus adentros el
secreto esquivo del sentimiento al torear pues cada lance que pega
va prendado de un tintinar de campanillas que avivan barreras palcos
y tendidos absortando al paisanaje de tal manera que a bobalicona.
Con la muleta tiene la
escogencia de las musas de permitir oír la marcha caballeresca
de un tropel de hormigas sobre la arena, como hemos dicho antes,
permite oír el tic tac lento de los relojes del paisanaje, que al
ver tanta belleza se olvidan de dolencias y males. Toma el de la puebla el
capote con el pulgar el índice y el dedo del corazón acaso será
una conexión arco reflejo cerebral que le envía duendes para su
ejecución, pues cada foto y cada video de el, no tiene desperdicio,
todo es grandeza belleza chantilly.
En su debut en Mérida,
Morante se encontró con un toro que le aplico en su faena, calidad
mas no cantidad, permitiéndole a los entendidos ver el porque de su
maestría y el porque de su inspiración, contados muletazos de
altísimo performance que la mayoría no entendió y “rechiflo”
dejando escrito en los anales de la plaza aquella comunión de
entrega y arte que merece un recuerdo en letras en una de las paredes
del patio de cuadrillas de la ya casi cincuentenaria plaza.
Paula y Morante de la Puebla |
Entre Paula y Morante hay
dos generaciones que han escrito con letras de verdad la razón de
la fiesta hay quienes tildan la misma de cruel, pues no, allí
no se anuncian seis toreros a muerte mucho menos cruenta pues
rara vez se riega la arena con sangre torera, otros se ciegan
ante el concepto de arte pero… invito a cualquiera de estos a pegar
un solo muletazo con gracia, eso es arte… y aquello de que no
es cultura ya muchas veces hemos dicho que, cultura es toda
aquella disciplina humana en la que se reúne un nutrido grupo de
personas a rendirle CULTO a alguien que la esta ejecutando
pues hay la falsa posición que cultura es la poesía pintura
escultura música, no… eso es arte.
Para que haya aquel
aderezo que reza el titular de este escrito debe haber sin
rebusques inspiración de lo contrario el artista de luces se
convierte en un trabajador del oficio tildados por muchos como…
obreros del arte.
¡Viva el arte!. ¡Que viva la fiesta!…
¡va por Uds!.…¡¡Castoreño
en mano…!!
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